Entrada de la Basílica en San Juan de los LagosLa prohibición es un elemento que aparece frecuenmente en el lenguaje religioso. Se trata de un elemento fundamental para que los creyentes distingan que están en un espacio sagrado. Sin prohibición, lo sagrado no existiría, porque sagrado significa separado. Sin embargo las prohibiciones van tomando distintos matices en una sociedad que evoluciona.
¿Cuál es el fundamento de la prohibición? Fundamentalmente hacer que exista lo sagrado, que se presenta como cualitativamente distinto a lo ordinario, que pasa a llamarse profano. De esa forma, aparece en la mentalidad de los sujetos religiosos una separación que les permite ordenar el mundo: lo sagrado y lo profano.
Las fotografías de esta entrada corresponden a la Basílica de San Juan de los Lagos, en Jalisco; y al Templo del Carmen en SLP.
¿Cuál es el fundamento de la prohibición? Fundamentalmente hacer que exista lo sagrado, que se presenta como cualitativamente distinto a lo ordinario, que pasa a llamarse profano. De esa forma, aparece en la mentalidad de los sujetos religiosos una separación que les permite ordenar el mundo: lo sagrado y lo profano.
Cartel en la entrada del Templo del Carmen, SLP.
Las fotografías de esta entrada corresponden a la Basílica de San Juan de los Lagos, en Jalisco; y al Templo del Carmen en SLP.
2 comentarios:
Sería interesante rastrear los orígenes de las prohibiciones en nuestra conciencia. Desde que era pequeño las prohibiciones surgieron como una llave de paso hacia la aceptación, el comportamiento coherente, "el vivir sin problemas ni regaños".
Y claro en primera instancia teníamos la ley de Moises como guía básica de prohibiciones. Después, si uno se internaba en el laberinto católico te encontrabas que los odres viejos ya no servían para contener el vino nuevo, entonces venía una especie de rebeldía en pro de un espíritu más liberal. Esta coyuntura para mí es importante ya que encuntro dos muros que dividen lo sagrado y lo profano: el primero nos impide, nos rechaza, es una luz imponente que no nos permite ver; y por otra parte hay una oscuridad inpenetrable, una lóbrega profundiad en donde lo sagrado se esconde, se convierte en un espíritu invisible, sin forma, sin una voz ni un sonido, pero esa oscuridad es una manto atractivo para los buscadores de tesoros.
En fin, lo sagrado es complicado.
Gracias por la sugerencia del tema, de rastrear los orígenes de las prohibiciones. En una entrada futura se abordará el tema. Bienvenidos sus comentarios.
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