domingo, 26 de febrero de 2012

La religión y las transformaciones sociales

Pluralidad religiosa en México

Presentación del libro en 
Museo Regional de Guadalajara, Pino Suárez e Hidalgo, Guadalajara. 
1 de marzo 17 hrs.

Además se presenta el libro electrónico : 
Diálogo: presente y futuro de las religiones y la espiritualidad,
y rueda de prensa sobre Visita del papa a México

lunes, 20 de febrero de 2012

Religión y convivencia

La relación entre las personas de diferentes religiones han sido siempre complicadas. Una de las razones centrales de la dificultad de la convivencia, es que las religiones se presentan como propuestas de “máximos”, es decir, se consideran referencias absolutas para alcanzar la virtud y al menos cierta felicidad. Quienes comparten una misma religión ven reforzadas sus ideas en la medida que el grupo es cerrado, pues unos y otros tejen un discurso centrado en los textos sagrados y en las referencias de autoridad que los mismos ministros se encargan de suministrar a la comunidad.

Cuando todos comparten la misma religión, el asunto no pasa a mayores, incluso los creyentes comparten perspectivas políticas, morales, educativas y de salud.

La convivencia se complica cuando aparecen creencias religiosas distintas. Los creyentes de la nueva religión son percibidos con claridad porque comparten otras ideas. Sin embargo, si la tradición religiosa es radicalmente distinta, la convivencia puede darse, en la medida que no se ponen en cuestión las creencias. En lenguaje llano, cada uno camina por su lado. Pero cuando la nueva religión tiene algunos vínculos con la que ya estaba presente, las cosas se pueden volver peligrosas, porque se pone en entredicho una cosmovisión instalada como la única. Es el caso del conflicto entre algunos fieles católicos y otros de la Luz del Mundo.

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Publicado en Proyecto Diez 20 feb 2011

domingo, 12 de febrero de 2012

Impresiones primeras sobre el arzobispo

José Francisco Robles Ortega entró a la arquidiócesis de Guadalajara bajo la perspectiva de la moderación que marca sanas distancias. Las dos celebraciones: toma de posesión de la Catedral y la misa de inicio del cargo, fueron dos acontecimientos simbólicos. Por un lado el arzobispo saliente se esforzó por señalar las conexiones en la continuidad como obra apostólica; sin embargo el nuevo arzobispo marcó distancias claras que fueron planteadas en varios términos: en principio, no aludió a la obra de Sandoval, sino a la acción de la Iglesia, se desmarcó de los actores políticos, aunque dejó abierta la puerta del diálogo con todos los sectores sociales, incluidos los miembros de otras confesiones que no comparten la fe católica.

Las lecturas de la Misa parecen la expresión de un plan pastoral. Se trata de tres textos muy breves pero con alto significado que pueden pasar de largo. Al mismo tiempo parecen haber sigo elegidos para marcar distancias con el antecesor. La primera lectura fue de Isaías 61, 1-3: "El Espíritu del Señor está sobre mí... me ha enviado a predicar la buena nueva a los abatidos, vendar los corazones quebrantados... consolar  a los afligidos". Un análisis rápido podrá señalar que se trata de un texto profético clave en la vida de Jesús, pero aplicado a las circunstancias del cambio, hay un mensaje que indica distancia con un modo de hacer las cosas, ¿por qué usa esta lectura? ¿consolar a los afligidos? ¿quiénes son los afligidos hoy en una ciudad que vive la violencia de manera distinta a la de Monterrey? No se han nombrado los afligidos, pero se han descrito. 


   De la mano de esta lectura, el salmo 22 señaló: El Señor es mi pastor nada me puede faltar. Nuevamente resulta importante señalar que es el Señor el que hace las cosas y el que dirige la comunidad. La segunda lectura 1 Pedro 5,1-4 señala  cuiden del rebaño no como dueños. Se trata de textos bien elegidos: breves, concisas y precisas. El texto final fue del evangelio de Juan 10, 11-16. 


    La homilía retoma las ideas de las lecturas y explicita algunas más:  "El Espíritu Santo está sobre mi y sobre todos ustedes… vengo como servidor, pregonero de la buena nueva, en el reposa nuestra confianza. Quiero ser un Pastor cercano, que refleje el buen olor de Cristo en el ministerio y el magisterio. Vuelvo con ilusión a la tierra que me vio nacer… queremos reavivar el don y estrechar la comunión… La comunión conduce a la misión. La misión para el cristiano es un compromiso con los demás hombres…. Necesitamos dialogar con la sociedad, podemos elegir entre cerrarnos en nosotros mismos o abrirnos al diálogo evangelizador… Nuestra iglesia debe fijarse en el diálogo siguiendo a Jesucristo, el diálogo es un modo de ejercitar la misión apostólica…  orientado a edificar un mundo mejor: claro, el diálogo supone la inteligibilidad, es un intercambio de pensamiento, nos debe llevar a revisar todas las formas de nuestro lenguaje; humilde y desde el amor. 


   Estas palabras pueden resultar esperanzadoras para los críticos de la acción pastoral y el modo de relacionarse de Juan Sandoval. Las acciones posteriores a estas palabras podrían estar en la línea de un acercamiento con sectores del catolicismo lastimados por un ejercicio pastoral centrado en el eclesiocentrismo y no en el cristocentrismo.

martes, 7 de febrero de 2012

El rey ha muerto, ¿viva el rey?

“El rey ha muerto, viva el rey” es una formulación antigua que se usaba en Francia y en Inglaterra, para señalar la permanencia de la monarquía a la muerte del rey en turno, y señalar al mismo tiempo el advenimiento del sucesor.

La expresión implica una afirmación, pero en el caso de la sucesión en el Arzobispado, no parece haber tal certeza, por eso, ante el activismo de Juan Sandoval y la escasa presencia –al menos hasta este momento- del Cardenal Robles Ortega, la frase puede adquirir un nuevo sentido “El rey ha muerto, ¿viva el rey?”

La figura fuerte hasta este momento, sigue siendo Sandoval, incluso algunos miembros del presbiterio y laicos suponen que seguirá tratando de dirigir. Pero es importante ubicar con precisión los datos. El Cardenal Sandoval, de acuerdo al Código de Derecho Canónico, dejó la responsabilidad de administrar la arquidiócesis. En ese sentido, y como dice un presbítero amigo, será un rey sin corona. Pero ahora lo importante es ¿qué debe hacer el sucesor?

De acuerdo con el Derecho Canónico, y más allá de las funciones de administrar los recursos, es importante señalar algunas actitudes que se indican en el Canon 383, que señala que el obispo debe mostrarse solícito con todos los fieles, incluidos los que se hayan apartado de la práctica de la religión. Además, si hay fieles de otro rito, debe proveer de ministros; por otra parte, debe mostrarse humano y caritativo con los hermanos que no estén en plena comunión con la Iglesia católica, -lo que implica no insultarles y descalificarles- fomentando el ecumenismo.

Es fundamental que el obispo sea testigo ante los hombres –bautizados o no- de la práctica de Jesús. Por lo que en la realización de su trabajo apostólico, -de acuerdo con el canon 384- debe oír a los presbíteros como a sus cooperadores y consejeros. Es decir, el obispo, no tiene la posesión de la verdad por el hecho mismo del nombramiento.

El canon 385 indica que la actividad pastoral no se realiza solo por parte del Arzobispo, sino de diversos ministerios laicales, y de la vida religiosa. Esto implica que debe establecer equipos de trabajo sólidos y plurales, donde se reconozca el aporte de cada miembro. El modelo de iglesia que proponga el nuevo Arzobispo será construido a partir de estas decisiones.

Otra actitud en el Arzobispo, tal vez una de las fundamentales, señalada por el Canon 386, tiene que ver con la predicación frecuente de la fe cristiana. Lo particularmente notable es el señalamiento de dos cuestiones: presentar y defender la totalidad de la fe; pero además reconocer la libertad de investigar más profundamente la verdad.

Lo importante en la tarea episcopal, no es defender a tal o cual candidato, indicar que los grupos que no pertenecen al catolicismo “no tienen madre”, o acusar a un partido político diciendo que son “hijos de las tinieblas”. Menos importante será levantar santuarios, o aprender los deportes que no se enseñan en el seminario. Será más importante reconocer a los hermanos en la fe y permitirles usar los templos, que cerrarles toda posibilidad de celebrar los sacramentos en espacios dignos, como sucedió con los ortodoxos.


La tarea, dicho de manera breve, es la que tuvo la familia de Nazaret al cuidar a Jesús: acompañarlo y ayudarlo a crecer en edad, gracia y sabiduría. Este es el parámetro que establece el canon 387 para valorar las acciones del nuevo Arzobispo de Guadalajara.

El lema en el escudo de Robles Ortega indica que le interesa caminar en este sentido: In simplicitate fidei, “en la simplicidad de la fe”. Lo cierto es que se ha de estar atentos, pues el antecesor utilizo como lema la expresión “servus” y actuó como “Dominus”.

Publicado en Proyecto Diez 7 de febrero, 2012

lunes, 6 de febrero de 2012

No perder de vista la utopía



La utopía sirve para caminar. Cierto, es el lugar que no existe, pero se presenta como horizonte desde el cual actuar.  Esto es importante porque de otra forma, se puede perder el sentido de la utopía al pensarla como algo inalcanzable. Por eso, hoy presento esta melodía que recupera la experiencia esencial de Francisco.


La muerte no es el final del camino. Símbolos y ritos ceremoniales en el catolicismo

Conferencia presentada en el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara : "La mue...